sábado, 26 de mayo de 2007

Vida

[Extraído de www.rae.es]

Vida:

(Del lat. vita).

1. f. Fuerza o actividad interna sustancial, mediante la que obra el ser que la posee.

2. f. Estado de actividad de los seres orgánicos.

3. f. Unión del alma y del cuerpo.

4. f. Espacio de tiempo que transcurre desde el nacimiento de un animal o un vegetal hasta su muerte.

5. f. Duración de las cosas.

6. f. Modo de vivir en lo tocante a la fortuna o desgracia de una persona, o a las comodidades o incomodidades con que vive.

7. f. Modo de vivir en orden a la profesión, empleo, oficio u ocupación.

8. f. Alimento necesario para vivir o mantener la existencia.

9. f. Conducta o método de vivir con relación a las acciones de los seres racionales.

10. f. Ser humano.

11. f. Relación o historia de las acciones notables ejecutadas por una persona durante su vida.

12. f. Estado del alma después de la muerte.

13. f. Prostitución (? actividad de quien mantiene relaciones sexuales a cambio de dinero). Echarse a la vida Ser de la vida

14. f. Cosa que origina suma complacencia.

15. f. Cosa que contribuye o sirve al ser o conservación de otra.

16. f. Estado de la gracia y proporción para el mérito de las buenas obras.

17. f. Vista y posesión de Dios en el cielo. Mejor vida Vida eterna

18. f. Expresión, viveza, especialmente hablando de los ojos.

19. f. Animación, vitalidad de una cosa o de una persona. Esta ciudad tiene poca vida nocturna Es un cuadro con mucha vida

20. f. Aleluya (? pliego con una serie de estampitas).


lunes, 14 de mayo de 2007

Terrible Truth #03: It doesn't really Matter



Dedicado a Rachel.

sábado, 12 de mayo de 2007

Napalm Death - You Suffer

Napalm Death - You Suffer (Scum)

You suffer
But why?

jueves, 3 de mayo de 2007

Mushishi, entre lo material y lo intangible

Publicado por mí en El Frikotaku:

Los aficionados al cómic y la animación japonesa vivimos una época agridulce. Si bien la llegada de este material a nuestro país es cada vez más fluída y la afición cada vez más extendida, también es cierto que la calidad media ha bajado considerablemente. Las obras se autoencasillan en estilos definidos y temáticas ya sobreexplotadas, y terminas con un buen montón de copias vanidosas y sin brío. No hay duda de que ahora lo que se lleva es el Shônen cerrado y el Shôjo facilón, por no hablar del humor Ecchi, repetitivo a más no poder. Las historias serias e interesantes, el magnífico estilo Seinen, parecen cosa del pasado. O eso es lo que uno piensa cuando está algo deprimido, hasta que una esperanza surge de la negrura.

En esta ocasión, la esperanza llega bajo el nombre de Mushishi. Se trata de un anime que descubrí hace cosa de medio año y que no había tenido tiempo de ver hasta ahora, cuando curiosamente ha empezado a publicarse en España la versión en manga del mismo. De momento no la he leído y no podría opinar sobre ella, así que me ceñiré a lo que respecta a la versión animada.

La historia trata de cómo un Mushishi, o lo que es lo mismo, un experto en Mushi, recorre el Japón tradicional investigando las distintas clases de Mushi y ayudando a la gente que tiene problemas con ellos. Los Mushi son unos seres cuya existencia es totalmente distinta a la de los humanos, las plantas o los animales, que viven en la línea que divide lo material de lo intangible, y que dependen del flujo vital del planeta. Este Mushishi, Ginkô, irá desvelando sus secretos a medida que la serie avance. El anime consta de 26 capítulos, todos ellos autoconclusivos.

Cuando nos disponemos a visionar Mushishi, estamos a punto de despegarnos de nuestros asuntos diarios para entrar en un mundo lleno de calma y serenidad. Cuando nos hayamos acostumbrado a la mecánica de la serie, atenderemos a las historias de Ginkô concentrados como niños. Y es que lo más destacable de este anime es la ambientación. Desde el principio hasta el final, la enorme calidad gráfica y de animación, a la par que la magnífica banda sonora y el espléndido trabajo de dirección, nos sumergirán en el medievo japonés de la cabeza a los pies. Pero sin ahogarnos. Mushishi desborda nostalgia por doquier.

Además, cabe mencionar lo original que es en lo que al estilo se refiere. Nos encontramos ante una muy acertada mezcla del mejor Seinen con un Shônen sobrio y un Shôjo sutil que tan sólo son perceptibles por el concepto de búsqueda de seres sobrenaturales siempre distintos (el famoso elemento Pokémon) y por el enfoque sentimental que tienen todas y cada una de las historias.

Lo único que quizá se le puede achacar es el tema de los Mushi como ser sobrenatural representativo de la Naturaleza. En seguida nos recordará a los Kodamas de la Princesa Mononoke, a la Corriente Vital de Final Fantasy VII y a mil cosas más. No es un error demasiado grande, porque el desarrollo lo hace único, pero en esencia peca de reiterar una temática bastante explotada. Esto y el hecho de que no haya una trama sólida tras todo ese bonito trasfondo. Los capítulos autoconclusivos son loables sobre todo por el hecho de que hoy en día prácticamente no se dan en ningún anime serio, pero quizá podría haberse alternado con una historia de fondo que añadiese interés al espectador. De hecho, existe un amago de ésto, y es que Ginkô nos irá mostrando cosas nuevas acerca de su vida en algunos capítulos puntuales de la serie, pero siempre de un modo tan escaso que dejará con ganas de más. Además, esta ausencia de trama principal hace que el último capítulo no tenga carácter de conclusión en absoluto, lo que alimenta mis sospechas de una posible futura continuación.

En fin, una obra de arte de la animación japonesa como pocas se ven hoy en día, que se define a sí misma y no responde plenamente a ninguna etiqueta comercial. Altamente recomendable.